La dinastía
Ptolemaica (2)
Antes de seguir con esta dinastía que, a la postre, fue la última que
reinó en Egipto, creo que es menester hacer las siguientes consideraciones:
A)
No es una dinastía efímera que se redujo a
Cleopatra y poco más. En realidad, se mantuvo al frente de Egipto durante casi
tres siglos.
B)
A pesar de que los diferentes faraones no
hablaran el idioma propio del país que gobernaban, sino el griego de sus
orígenes, durante esta época se construyeron nuevos templos sobre los antiguos,
los que generalmente se visitan en el crucero que transcurre por el curso medio
de El Nilo: cómo los de Philae, Edfu, o Kom Ombo
C)
No se puede, ni debe, enjuiciar a una
civilización diferente a la nuestra con las normas éticas, sociales y morales
que rigen en la actualidad. En el Egipto faraónico era habitual el incesto
entre los faraones o sus herederos para reafirmar (según sus creencias) su
esencia divina y la "pureza de la sangre". Tampoco fueron
excepcionales los asesinatos por motivos dinásticos o sucesorios. Esta práctica
se hace norma durante la dinastía. Así como el asesinato sistemático de
cualquiera, especialmente familiares, que pudiesen interponerse en el camino o
disfrute del poder ya adquirido.
Una vez sentadas
esas premisas, pasaré al tema que nos ocupa.
En el año 323 a. C.,
tras la muerte de Alejandro Magno, Ptolomeo I Soter, uno de los generales del
difunto, al repartirse el imperio conquistado por el macedonio se queda con el
reino de Egipto como Faraón (dignidad que ya ostentaba Alejandro), iniciando la
Dinastía XXVI, llamada Ptolemaica, que también se conoce con el nombre de dinastía Lágida,
ya que Lagos era el nombre del presunto padre) de Ptolomeo I.
La
dinastía gobernó en el Antiguo Egipto durante el
denominado período helenístico, que transcurre desde la muerte de Alejandro
Magno, acaecida en el año 323 a. C. hasta la derrota de los ejércitos
faraónicos, y muerte de Cleopatra VII en el año 30 a.C. que marcó el fin del
Imperio Egipcio, pasando el país a ser una colonia romana.
Esta
última dinastía que corresponde cronológicamente a la de Ptolomeo I estableció
cómo capital del reino a Alejandría, que se transformó en el principal centro
comercial e intelectual de la antigüedad.
Cabe
destacar que durante el reinado de Ptolomeo V fue cuando se publicó un
decreto en tres tipos de escrituras, que conocemos como Piedra de Rosetta, que,
cómo sabemos, permitió traducir el idioma del antiguo Egipto.